Inditex amplía y reordena sus parcelas para seguir creciendo en Arteixo

Distintos medios mecánicos como palas, martillos, grúas y camiones han estado echando abajo estos días cuatro naves que compartían terreno con otras construcciones de la multinacional textil en una parcela de 50.000 metros cuadrados, en el polígono de Sabón (Arteixo, A Coruña). Se trata de infraestructuras que fueron construidas en la década de los ochenta y que formaban parte del complejo inicial con el que Inditex comenzó a levantar su infraestructura productiva (1977). Desde entonces, no ha parado de crecer, hasta el punto de que, a día de hoy, la compañía que preside Marta Ortega es dueña de al menos la mitad del polígono industrial, cuya superficie total suma 3,3 millones de metros cuadrados, el más grande de Galicia.

Inditex concibe Arteixo como el centro neurálgico de la compañía y así ha ido modelando su crecimiento. Además del inmueble que alberga a los departamentos administrativos, financieros y de dirección, en Sabón cuenta también la multinacional con grandes naves destinadas al área logística y dependencias para unos equipos comerciales y de diseño que han ido ganando protagonismo y requiriendo mayores espacios.